Por lo tanto...tu?, no!

Pero no, tú no comprenderías de la oscuridad

Tu brillantes flota, se eleva por sobre aquello que me forjó hace siglos

Tú te desenvuelves bajo el sol, al abrazo cálido de tu tribu, tus hermanos

Cuando reías, reían contigo y yo lloraba, al son de mis largos cabellos que cayendo mezclados con el humo y el desorden,  me hacian palidecer

Y asi  tú reías más

Tus ojos brillaban, frente al amor de tu creador, cantando en alabanza,

Mientras yo buscaba mis raíces bajo la lluvia de junio, ante el árbol de la soledad

Sin libros que me guiasen, ni amuletos que me protegieran

Por lo tanto, tú no comprenderías de la oscuridad

Lejos de tu entendimiento florecí

 Danzando en las profundidades goberné,

Allá donde tu luz no llega,

 Desde esas entrañas que maldices, avancé resplandeciente y luminosa al hoy

Mas aceptarme, es aceptar el todo que soy, y aquella tarea hoy no cabría en tu corazón

Intento...respirar

Intento olvidarte por un momento, lanzarte, lejos a un rincón oscuro de mi mente,

Intento respirar

Desplazar los recuerdos, las ensoñaciones que he creado de ti, arrancarlas de mis mañanas, de mis noches, de las horas.

Quiero  respirar,

Sentir en la maravilla de mi existencia algo que no te traiga a mis pensamientos nuevamente

Mas, estas ahí, lejano, intocable como el anaranjado horizonte, que observo al borde de las lágrimas entre suspiros de inagotable felicidad

Tu presencia altera los pasos que debo seguir, altera cada uno de mis movimientos, que creía tan firmes, tan llenos de mí

Déjame respirar, borra en mí tu existencia, extingue con tu divinidad todo rastro de lo que una vez pude sentir por ti, de lo que una vez llame amor.