Me alejo

No me alejo para escapar

Me alejo para sentirnos

Lejos del bullicio grisáceo y artificial que nos cobija  a golpes

 intentando amoldarnos a su antojo

Como quien trata de encajar a la fuerza una pieza en un  viejo rompecabezas

Queriendo dar forma algún paisaje desteñido.

Intento sentirnos

No somos esto

Somos dioses pisoteados por la estrechez de una mente colectiva que temió un día la grandeza  de nuestras almas

y desde aquel dia el sonido de las cadenas que nos atan nos adormecen

en aquel vaivén perecemos masoquistas y temerosos.

Me alejo para sentir la divinidad que escapa en un gesto de compasión

Porque cuando te veo entre bosques,  escalando la cordillera, o desnudo en el lago o en el mar

Y observo brotar espontánea tu sonrisa,

siento que has conectado con lo que te hace sentir felicidad

Y creo en ti, en mi

En nosotros,

Me alejo para enamorarme nuevamente de la humanidad.

He Vuelto

Hundo los pies en ti

Quiero sentirte ahora

Si me aleje nunca fue para perderme

Extrañarte, me hizo más fuerte

La nostalgia me impulso

En el  viento de sus gritos

Y el calor de su cólera, me forje para vengarte.

He vuelto a la manada

Me guío el dulce incienso en la hoguera

Y la tierra mojada

Asi nos reunimos alrededor del fuego

Danzando ofrendas a la abundancia

De lluvia, mar y flores

De sol y fresca fruta madura

Hundo los pies en ti.

Imagino quien habrás sido

Cuanto amor habremos despertado la una en la otra

Porque jamás sentí tanta ternura en la mirada de alguien.

En este mundo que poco conoce de respeto

Entre los de su propia especie y tilda de inferiores a los que andan por ahí sin cubrirse

Yo sentí más amor que mirando a un semejante

Y es que tu visión no está sesgada

No conoces la mentira, no estás para juzgar

Y evitando distraerme por tus formas, cierro los ojos y visualizo tu esencia

Cuanta luz debe emanar de ella

Como serán nuestras almas en comunión

Como será la expresión de ese amor.

Quien maltrata a un animal

Ofende a Dios

Ofende a Dios porque en sus almas de pura inocencia

No conocen de maldad, del bien o que es moral

Como mentir o como traicionar

Solo comprenden del amar

Son todo aquello de lo luminoso y amoroso que existe en la tierra

Son un regalo, una prueba de la existencia de la divinidad

Y Dios en su inmensa sabiduría lo deposito en cuerpos “bestiales”

Su prueba, ver si reconocemos su amor cuando lo tenemos al frente...

si reconocemos a Dios.

No estamos solos

No estamos solos

Del padre sol seguimos el rastro

Dorado y anaranjado sendero bendito

A su paso germinan semillas y se abren las flores

Al son del susurro del suave rio primaveral.

Hadas, duendes

 Faunos y mariposas

Criaturas de cuentos, de fábulas

Seres difíciles de encontrar

Tejen sus encuentros entre telarañas y cuevas escondidas

Justo antes del atardecer.

Seguirán tu paso,

Todo el trayecto o solo una parte de el

Estarán cuando los necesites

Cuando la soledad te agobie o sientas sed

Oirás la música o un agradable pensamiento tu corazón tranquilizará

Incluso tal vez adopten humana corporeidad

Una mano, una compañía, un saludo u otra  señal.

Ellos saben como ayudarte a continuar

Y si de repente al llegar a destino ninguna de las señales logras apreciar

Es que tu alma reúne tal fortaleza que de seguro son requeridos por alguien más.