Mi mision

"...Quizás deberiamos pasar más tiempo arrodillados ante los demás, olvidar nuestros altares de papel por un buen rato, solo contemplar, verás al cambiar fisicamente tu perspectiva de todos y todo, no solo los enalteces en visión sino también en esencia, es increible como ves la grandeza de todos al inclinarte entonces al ver su grandeza se activa en tu corazón aquello que se le suele llamar amor que no es más que ver el todo en todo, el universo en un solo ser..."

lunes, 28 de enero de 2013

Somos

En el ocaso de lo que admiramos como nosotros, nos regocijamos orgullosos ante la obra, la creación años elevada ante los demás, agónicos temblorosos al caer de las caretas, vergonzosos a la desnudez de nuestra realidad, que vanamente buscamos creyendo encontrar en compañía de otros, al albergue de lo conocido, lo tradicionalmente aceptado, mas esta no es sino otra falacia que nos contamos en las noches tormentosas para no caer en la desesperación del qué ser, para qué ser, no somos obras acabadas, ni siquiera alguna vez fuimos lienzos, pues somos los pinceles, somos los colores, y aquellos momentos en que verdaderamente somos, es tan efímero como aquel en que el color salta airado del pincel a la tela, pues al caer en la inmaculada palidez de la delicada superficie se esparce el color unificándose, perdiéndose, siendo parte del todo así somos, vivamos el instante ideal efímero de realidad en que antes de caer en la marea, en ese oleaje de creencias, de valores enaltecidos, somos intrínsecamente un tono, un fragmento de creación creadora, pues aunque nos malgastemos en adherirnos a más y más disfraces, o personajes, ninguno de ellos somos, gocemos de ellos y aprendamos de ellos, porque recordemos que así como todo en este planeta es caduco, una despedida corta y a tiempo siempre será mejor y más sana.